NUESTRA EMPRESA
¡UNA EMPRESA DE CHURRERÍA TRADICIONAL!
Durante tres generaciones y más de 100 años, nuestra churrería se ha caracterizado por ofrecer a los clientes un producto de calidad y a buen precio. De abuelos a nietos y de padres a hijos, hemos mantenido la receta tradicional, la de toda la vida. Esto nos ha ayudado a situarnos en muy buena posición en el mercado de los churros. Todo ello no hubiera sido posible sin nuestro importante equipo de cocineros y camareros que, además de servir este exquisito producto, brindan a nuestros clientes un trato de excepción. Nuestro producto está elaborado con harina de primer nivel y aceite de girasol refinado de gran calidad.
Además, contamos con un ingrediente importantísimo para la producción de un producto de calidad: el inmenso cariño que nuestros profesionales ponen en la elaboración del plato español más tradicional, el churro. Los congelados están ya previamente fritos, lo que permite que solo tenga que calentarlo en una tostadora, grill u horno y… ¡a disfrutarlos! Los churros son productos que se pueden disfrutar de cualquier manera: con chocolate a la taza, mojándolos en café o en leche; y en cualquier momento del día. En el desayuno, en la cena o como postre para comidas y cenas. No se lo piense más y recuerde que, para darse un respiro, ¡puede disfrutar de los Churros Casimiro!
aquellos maravillosos Años...
En el pintoresco año 1963, en la encantadora ciudad de Salamanca. Unos años antes, en 1950 mis padres comenzaron su fascinante viaje empresarial en la reconocida churrería "La Castellana". Una tradición heredada de mi abuelo que comenzó por el año 1900 en un pequeño puesto cercano a la orilla del Tormes. Este rincón gastronómico, situado frente a La Posada, se convirtió en un punto de encuentro para locales y visitantes que buscaban disfrutar de los deliciosos churros y porras que emanaban de este establecimiento. La churrería "La Castellana" se destacaba no solo por la calidad de sus productos, sino también por el ambiente acogedor que ofrecía. Era un lugar donde las risas de los clientes se mezclaban con el irresistible aroma de la masa frita y el chocolate caliente, creando recuerdos inolvidables para todos los que lo visitaban. Con el paso de los años, "La Castellana" se convirtió en un referente en la vida de la comunidad salmantina. Familias enteras compartían momentos especiales en sus mesas, estudiantes encontraban un refugio reconfortante entre sus apuntes y parejas disfrutaban de románticos desayunos. En un giro nostálgico del destino, hoy en día, el lugar que una vez albergó la churrería "La Castellana" ha dado paso al elegante Hotel Condal. Aunque la esencia del antiguo establecimiento ha cambiado, la historia de mis padres en este icónico espacio perdura en el tiempo.
'Churros Casimiro' triunfa en Estados Unidos
Cerca de un siglo de trayectoria profesional ha llevado a los responsables de 'Churros Casimiro' a pasar de un pequeño establecimiento de barrio en la capital salmantina a desarrollar un sistema de envasado de estos postres que, pese a su corta experiencia en el mercado, está consiguiendo una demanda que ha superado las expectativas de su promotor.
Churros salmantinos para tres continentes
Y del avión descendieron al mar para abaratar costes. Ahora llegan a Estados Unidos en contenedores, de la misma forma que, de manera permanente, lo hace a Panamá, o de forma esporádica a México o a Singapur. A modo de ejemplo, apuntan a los 150.000 churros vendidos en México «de una tacada», o los 130.000 a Singapur. Inglaterra, Francia, Holanda, también figuran entre sus destinos.
En Churros Casimiro, fusionamos la tradición con la innovación para crear churros que conquistan paladares en todo el mundo. Nuestra receta centenaria se ha perfeccionado a lo largo de los años, asegurando que cada bocado sea una explosión de sabor y textura inigualables. ¿Te preguntas cómo llevar la magia de nuestros churros a tu país? ¡No te preocupes! Exportamos Churros Casimiro a diferentes rincones del planeta.
La exportación de nuestros churros a distintos países es una aventura que nos llena de orgullo. Desde la planificación hasta la entrega, cada paso está marcado por la excelencia y la dedicación. Nos esforzamos por llevar el auténtico sabor de los churros a nuevos horizontes, compartiendo nuestra tradición con aquellos que buscan una experiencia única y deliciosa.